EL TRONO MAJESTUOSO
Juan ve una puerta abierta, entra y observa algo maravilloso: Y al instante yo estaba en el espíritu y he aquí un trono establecido en el cielo, y en el trono Uno sentado y su aspecto era semejante a piedra de jaspe y cornalina y había alrededor del trono un arcoiris con aspecto de esmeralda. (Ap. 4:2-3).
Cerca del trono habían veinticuatro tronos con unos ancianos vestidos de blanco con coronas de oro, y allí ardían siete lámparas que son los siete espíritus de Dios.
El trono que está en el cielo representa juicio justo y santo. Quien lo ocupa es Dios. Las piedras que lo describen nos evocan belleza y resplandor. El arcoiris verde significa esperanza y sanidad. Los veinticuatro ancianos son redimidos, coronados como reyes y sacerdotes. También pueden representar los doce patriarcas y los doce apóstoles.
LOS CUATRO SERES VIVIENTES
Junto al trono y alrededor de él, estaban cuatro seres vivientes que tenían seis alas llenas de ojos. El primer ser viviente era semejante a un león, el segundo semejante a un becerro, el tercero tenía rostro de hombre, y el cuarto semejante a un águila. (Ap. 4:7).
En el Antiguo Testamento se habla de estos cuatro seres vivientes. Se les conoce como querubines custodios. El león es valor, el becerro servicio, el hombre amor e inteligencia, y el águila alta visión.
En el Apocalipsis los cuatro seres vivientes están dedicados a la alabanza y a la ejecución de la ira de Dios
LA ADORACIÓN
Los cuatro seres vivientes no cesan de decir: Santo santo, santo es el Señor Dios todopoderoso, el que era, el que es y el que ha de venir. (Ap.4:8)
Y los veinticuatro ancianos se postran ante el trono diciendo: Señor, eres digno de recibir la gloria, la honra y el poder, porque Tú creaste todas las cosas y por tu voluntad existen y fueron creadas (Ap. 4:11)
PARA REFLEXIONAR
¿Te has imaginado alguna vez como es la morada de Dios? Apocalipsis nos abre la puerta para contemplarla.
Frente al trono vemos ángeles, querubines, santos y sacerdotes en permanente adoración y alabanza.
Existen tres divisiones del cielo. Uno es el cielo alto donde está el lugar de Dios, su morada y su trono. Más abajo existe el cielo intermedio donde habitan muchos seres peligrosos y huestes de satanás. Y más cerca de la tierra está el cielo bajo.
En todo lugar habitan demonios, salvo el cielo alto o morada de Dios. Al caer lucifer, éste se tomó cada lugar existente para gobernar y engañar a los hombres. Ten cuidado porque existen muchos seres malignos que se hacen pasar por luminosos.
El lugar de Dios es totalmente majestuoso. Allí habita la santidad.
Esfuérzate aquí en la tierra para estar en su morada.